Cachorrita sin vacunar

Buenas noches a tod@s!Ayer estuve con Moritz en el parque y nos encontramos con una chica que llevaba una cachorrita de labrador (cruce con algo más) de 2 meses. Al ver a Moritz se puso como loca y estuvieron jugando un rato. La cuestión es que ya me sorprendió mucho que la chica llevara a un cachorro de dos meses suelto por el parque... y hablando me estuvo contando que no le había puesto ninguna vacuna al perrito (que sabía que se arriesgaba mucho pero que pasaba de pagar tanto dinero por las vacunas... toda ella bastante irresponsable). Sin haber vacunado al cachorrete, esta chica lo llevaba suelto por el parque, lo entraba dentro del pipi-can, lo bañaba una vez al mes... Total, mi pregunta es: mi perro corre algun riesgo por juguetear con un cachorro (o perro adulto también) que no está vacunado? El mio tiene 4 años y las vacunas al día. Gracias!!!

No. Realmente no.El riesgo lo tiene el otro perro, deberías haberle hablado de la parvovirosis... Probablemente se le muera, pobre.

Es que claro... el porrito de vez en cuando no puede faltar! Mucho más importante que una vacuna para el peludo... donde va a parar!!Me contó que estaba de alquiler y había metido al perro en el piso sin el permiso de la propietaria, que ya había tenido historias con los vecinos... Como os he dicho, toda ella estaba envuelta en una nube de irresponsabilidad total. Es una lástima! Y gracias por responder a mi duda!

Hablando de los contagios, se me plantea otra duda... Puede existir el contagio de leishmania entre dos perros (uno sano y otro contagiado)? Después de asistir a algunas conferencias sobre el tema y leer un poco, me da la sensación que podría ser equiparable (más o menos eh...) al VIH en humanos, de manera que me planteo si por contacto sanguíneo podría ser contagiable (a veces se mordisquean jugando, o en una pelea, etc.). Quizá esté diciendo una barbaridad eh, pero me surgen estas dudas porque el perro de mi suegra (un Bulldog francés) tiene leishmania, aunque muy controlada. Qué pensais?

Si miras el ciclo de leishmania, el parásito cuando es inyectado por el vector cambia de forma, y pasa de una forma flagelada a una redonda, sin flagelo. Esta es la forma que viaja por el torrente sanguíneo, y normalmente no tiene capacidad metacíclica (infectiva). Cuando el díptero (vector) vuelve a picar al perro y succiona la sangre se lleva los parásitos en forma redonda (la del torrente sanguíneo) y dentro del vector vuelven a cambiar de forma dos veces, hasta adquirir otra vez la capacidad infectiva. Es decir, leishmania necesita obligatoriamente al vector para contagiar a un nuevo individuo.