ladra mucho cuando llaman a la puerta

Pues mi perra dejó de hacerlo ella sola,ignorando su comportamiento..

No digo que te sirva.pero era Satanás al oir el timbre.

Ahora ni se inmuta.

Qué hice?  No lo sé.

Evadbo7 dijo:

Pues mi perra dejó de hacerlo ella sola,ignorando su comportamiento..

No digo que te sirva.pero era Satanás al oir el timbre.

Ahora ni se inmuta.

Qué hice?  No lo sé.

Seguramente tu perra dejo de hacerlo cuando aún era cachorra. Lo ignoraste correctamente y no quedo arraigado. Sin embargo el de este usuario y el de mi cliente llevan años haciendo lo mismo y entonces tenemos que trabajar sobre un descondicionaminento.
Si la conducta está arraigada, con ignorar no será suficiente.

Yo creo que entendió que no era necesario.

Un tema muy interesante. Estoy trabajando sobre ello ahora mismo con un cliente que tiene un perrillo que cuando llaman al portero automático o al timbre de casa iba corriendo como una posesa a la puerta, se ponía a ladrar y a arañar la puerta.
El problema no parecía tal hasta que nacío su hija. Claro, la pequeñaja está durmiendo la siesta en su cochecito y si llaman a la puerta se arma una buena, ladridos, voces....en definitiva, niña despierta, padres alterados y discusiones al canto.
Me llamaron y estamos con el problema solucionado en un 90%. Llevamos 40 días de trabajo más los fines de semana en que ellos solos lo trabajan. Estimo que nos quedarán unos 5 días más para erradicarlo casi en su totalidad.
Paso a describir el trabajo...

Todo el trabajo se realizará en positivo, con clicker o confirmación vocal y con comida.

1.- cambiar normas de comportamiento en casa, rituales de salidas y protocolos.  Esto junto con normas en los paseos nos servirán para que el perro comprenda el trabajo del Bien.

2.- trabajo de puesto. Pondremos una toalla en el suelo y enseñaremos a tumbarse en ella y a permanecer sobre la misma hasta la orden de liberación

3.- trabajo de búsqueda. En algún lugar de la casa retirado de la puerta lanzaremos trocitos de comida al suelo y con la orden de búsqueda que se pongan a buscar y comer lo que encuentre.

4.- caricias tranquilizantes. Aprender a acariciar al perro de forma sensible. Caricias cortas y sin presión, sobre todos en cabeza y orejas y hablar muy muy bajito y de forma templada.

5.- cuando estos trabajos se han realizado por separado los iremos incluyendo en el protocolo del timbre de forma seguida al principio y alterna despúes. Suena el timbre y puestooooo. Confirmamos y premiamos. Igual para el busca. Suena l timbre y buuuuusca, lanzándole la comida en el sitio donde se le acostumbro. Y por último, suena el timbre le llamamos y acariciamos tranquilamente como aprendimos en el ejercicio. Iremos variando uno u otro y siempre que suene el timbre ponerlo en marcha.
Al principio ignoraremos los ladridos y le propondremos el ejercicio. En 5 días sonara el timbre y el perro permanecerá expectante cual es el ejercicio que toca. Las caricias las utilizaremos en los momentos en que los otros dos ejercicios activen en sobre manera al perro.

También podemos grabar el sonido del timbre y trabajar los ejercicios 2 y 3 mientras ponemos en marcha la grabación ininterrumpidamente.