Posible linfoadenopatía etapa II + convulsiones

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Titulo: Posible linfoadenopatía etapa II + convulsiones

Shirleyca

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Sexo: Mujer
Edad: 43 años
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Publicado: Tuesday 10 de February de 2015, 23:12

Mi perrito es un Cocker Spaniel de 8 años (noviembre 2014). Siempre fue un animalito muy fuerte y sano. Lo tenemos desde sus 2 años aprox. y lo alimentamos con RICO CAN croquetas y latas, pollo sancochado o carne (a veces para hacer atractivo su plato, porque le gustan mucho las carnes). El año pasado en julio presentó una pequeña inflamación a la altura de la cadera derecha y, aparentemente, le dolía cuando lo tocábamos o quería subir a algún lugar alto. Su veterinaria aquí (vivimos en la ciudad de Cajamarca), le colocó una inyección de un desinflamante y nos dijo que en 3 días debía bajar. Al cabo de ese tiempo, seguí casi igual y, por teléfono, me recetó Dolocordralán (x 3 días, 1/2 tableta, 3 veces al día).

Así lo hicimos, pero, después del 1er día, el animal reaccionó con una ansiedad desmedida, sobreexcitación sexual (quería cubrir a nuestra perrita Samoyedo que está esterilizada), y agitación. Al 3er día, el animal terminó extenuado y vomitando, sin poder tomar ni agua, con una taquicardia tan fuerte que reflejaba en el estómago. La veterinaria nos indicó darle omeprazol y suero pediátrico, y observarlo. Así lo hicimos, pero decidimos salir fuera de la ciudad (a un lugar de más altura) para descansar con él. Allá se decayó mucho, no quería comer ni beber líquidos, por lo que regresamos al siguiente día a primera hora. Al llegar acá, le colocaron suero, lactato ringer, metamizol, omeprazol y otros. Entonces, pasó de la taquicardia a la bredicarda y aplicaron epinefrina. Estuvo en cama por 5 días aprox. y después reaccionó muy bien. Parecía que tenía más energía y vitalidad. Luego de 15 días aprox. una tarde tuvo una especie de ataque, donde permaneció sentado temblando y babeando por casi un minuto. Después parecía agitado y un poco desorientado. Ese mismo día y tuvo dos episodios más similares. Luego cada 15 días empezó con convulsiones marcadas (como epilepsia) que duraban unos 2 ó 3 minutos hasta que reaccionaba totalmente y volvía a actuar normal. Estas se presentaban por espacio de 3 días, cada 3 ó 4 horas en promedio. De tal modo que nosotros ya sabíamos cuándo esperarlas. Luego de unos 2 meses y medio más o menos, la veterinaria nos indicó darle fenitoína sódica 100mg (1/2 pastilla diaria a la misma hora).

Al inicio, cortó el tiempo durante el que aparecían las convulsiones, y las disminuyó a 1 ó 2 en un día, e, incluso, las espació más. Al cabo de 1.5 meses con ese tratamiento, un día yo vi entrar una pulga grande (2mm aprox.) de color vino por su cabeza y no pude atraparla. No insistí, porque pensé que el antipulgas haría su trabajo, pero, al siguiente día, el perrito apareció con un ganglio muy inflamado (tamaño de un huevo) en el maxilar derecho). La veterinaria dijo que posiblemente se había hecho alguna herida y que esa era una reacción normal. Le aplicó desinflamante en inyección por 3 días, pero desinflamó un lado e inflamó el otro. Con los días y el ejercicio (salir a correr los sábados y domingos), se inflamaron más ganglios. La veterinaria aplicó el mismo método y recetó dexametasona 0.5mg (1/2 pastilla al día para mantenimiento). Luego de un mes en esta situación, la veterinaria indicó darle 0.5ml de INMUNAIR al día para levantar sus defensas. La reacción el primer día fue aletargamiento fuerte. Entonces, yo me informé de que la fenitoína causaba inflamación de ganglios y bajaba las defensas, entre otros. Se lo dije a la veterinaria y se la retiramos. Pero, a su vez, averigüé que el complejo B forte (con 50mg. de piridoxina podía evitar las convulsiones pro la síntesis del ácido GABA), y la aplicamos con el permiso de la veterinaria, con resultados satisfactorios, porque no hubo convulsiones ni tetanias por durante su ingesta (1 cápsula a la semana).

Cabe acotar aquí que, él ya venía tomando complejo B (COFANA que tienes dosis mínimas de todo y calcio pantotenato en 2mg), por indicación de la veterinaria aduciendo que era para proteger su hígado y alargarle la vida. Por otro lado, los ganglios inflamados y ya endurecidos seguían sin bajar. Así hemos seguido por los últimos 25 días aprox.: aplicando desinflamantes en inyección x 3 días y cortándolo; desinflamante, analgésico y antibiótico x 3 días y cortándolo; dándole dexametasona de 0.5mg a veces, o 1/2 paracetamol si hacía fiebre (lo detectábamos por la nariz seca y caliente), y una vez 1/4 antalgina. Hace unos 13 días más o menos decayó su apetito notablemente. A veces quería comer pollo solamente. Así que, optamos por darle la comida en la boca con una cuchara (sopa de pollo con arroz o sus croquetas remojadas en caldo). Hace una semana le hicieron análisis y de los resultados se destaca lo siguiente: eritrocitos 3, 460, 000 /mm3, leucocitos 11, 350/ mm3, hemoglobina 11.2g/100ml, hematrocito 35%, eosinófilos 01%, neutrófilos 88%, segmentados 84%, abastonados 04%, linfocitos 11%. Urea 62mg/dl, creatinina 1,207 mg/dl, proteínas 5.29g/dl, globulinas 2.35g/dl, albúminas 2.84 g/dl, fosfatasa alcalina 278.37 UI/I. Con esto, la doctora nos dice que nuestro perrito tiene linfoadenopatía en etapa II. Por ello, el domingo le dio omeprazol, 1 dexametasona 0.5mg, 2 cdtas. prednisona 5ml (mañana y noche), para bajar los ganglios. La reacción en la noche fue de ansiedad y agitación, luego de haber reaccionado favorablemente en el día. Le dimos también NUTRICAL (3 cdtas.) para complementar su alimentación que era básicamente pollo sancochado. Luego, el lunes a las 6.30 am hizo una convulsión fuerte y siguieron 4 más (cada 1 o 1.5 hrs.).

Le suprimimos la prednisona en la mañana porque encontré que inhibía la acción de la peridoxina del complejo B, y sospeché que por ello habían vuelto las convulsiones. Dimos otro complejo B, por orden de la veterinaria (3 días después de la última toma)y pasó bien el día. A las 6.30 pm volvió a convulsionar y le dimos 1/2 pastilla de NEUROALIVIO (que nos dejó la veterinaria como anticonvulsionante veterinario). A las 8.30pm le dimos 0,5 ml de prednisona como nos indicó (dijo que era la dosis más adecuada), y a los 5 min. empezó con la ansiedad, agitación y comportamiento obsesivo por comer pollo. Luego siguieron más convulsiones desde las 9.30pm hasta las 3am (cada 1 o 1.5 hrs. y dimos la otra mitad de NEUROALIVIO) y tres más las 6.15 am, 7.40am, y 10am, luego de tomar omeprazol y complejo B, como indicó la doctora. Cuando lo vio a las 10am, nos dijo que estaban inflamados otros ganglios en los brazos y piernas, que había perdido mucha masa muscular, y que sus signos vitales estaban mal. Le aplicó suero 300ml, lactato ringer, metamizol, y antibiótico para normalizar. Ahora, lo recogimos la 1pm, dormido, estable, pero ella nos dice que está sufriendo y que es mejor sacrificarlo, porque ha presentado una inflamación de las glándulas suprarrenales.

Sinceramente y de todo corazón, necesito una segunda opinión.

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