Terapia Asistida por Animales
Debemos saber.........
Terapia Asistida por Animales
Que los animales nos pueden ayudar en infinidad de cosas, no es ninguna novedad. Lo que sí nos puede parecer de descubrimiento reciente es la utilización de los mismos para problemas mentales, de socialización… Pero esto ya se descubrió hace mucho.
“Grosso modo” haré un breve viaje histórico:
El primer registro que se tuvo, data del año 1792, en un asilo de York (Reino Unido). Utilizaron perros como modificadores positivos de conducta.
1867, en Bethel (Alemania) los utilizó para sobrellevar la epilepsia de algunos enfermos, con resultados muy positivos.
1940, el Centro Pawling de Convalecencia de las Fuerzas Aéreas norteamericanas, decidió relacionar animales de granja con veteranos convalecientes.
1962, el psiquiatra Boris Levison que siempre iba a la consulta con su perro Jingles, descubrió de manera anecdótica, como un niño que había entrado en la sala de espera de su consulta, bastante nervioso, comenzó a acariciar a su perro y logró tranquilizarse de manera sorprendente, antes de entrar en su despacho.
1970, Sam y Elizabeth Corson, en el hospital de Ohio State University, buscaron la interacción de los perros con los enfermos. Los pacientes al oír a los animales ladrar, pedían jugar con ellos, mejorando su conducta introvertida.
En España la entrada de esta terapia ha sido tardía. En 1990 la Fundación Affinity, presentó la terapia asistida por animales de compañía a la comunidad médica española. Gracias a ellos, hoy en día tenemos asociaciones que están ayudando a miles de niños y personas que tanto lo necesitan y que responde de manera muy positiva a los estímulos generados por todo tipo de animales, no sólo perros.
Entre los beneficios de estas interacciones, las cuales están ya más que contrastadas, se encuentran las siguientes:
Reduce el estrés en los enfermos de Alzheimer, ayudando a reducir los temblores que aquejan a las personas que desgraciadamente padecen esta enfermedad.
Produce un efecto relajante y sedante cuando entran en contacto con gente que tiene desequilibrios psicológicos.
En centros penitenciarios, reducen los niveles de violencia y aislamiento de los reclusos.
Hoy en día, en las grandes empresas, sólo unas pocas por desgracia, permiten la entrada de las mascotas en el trabajo, ayudando a una mejor del rendimiento, estar más relajados y hacer un ambiente laboral más distendido y familiar.
Con niños autistas, la interacción con perros, caballos, delfines ha sido casi siempre positiva.
De forma individual ayudan a:
Mejorar todos nuestros sentidos , ya que estamos pendientes de ellos, bien a través de la vista, el oído, por si nos “dice algo”, el tacto, ya que el tocar y ser tocados nos relaja, acariciarlo ayuda a bajar nuestro ritmo cardíaco y la presión arterial.
En cuanto al sistema motor, nos ayuda a hacer ejercicio, por los paseos que damos, también ayuda así a nuestro sistema cardiovascular.
En el nivel psicológico. Nos fuerza a interactuar con nuestros semejantes y hablar con personas con las que nos cruzamos y tienen otro perrito…
Mejoran nuestra autoestima, los perros no juzgan ni critican nuestra forma de ser, por muy detestable que sea
.
Mejora la toma de decisiones, ya que somos responsable de un ser vivo y tenemos que tomar las mejores decisiones para que su vida sea lo mejor posible.
Desarrollamos con ellos pensamientos positivos, ya que no nos crean pensamientos problemáticos.
Ahora bien, no debemos olvidarnos, de que son terapias complementarias. Si se está siguiendo un tratamiento médico debemos de seguir con el. También hay que recordar que no hay unas reglas fijas en la duración de estos tratamientos y que el ambiente tranquilo y la paciencia son dos factores fundamentales para lograr mejorías.
El perro, para que pueda ser “terapeuta” debe estar sano y siempre bajo la vigilancia de la persona que esta a su cargo.
Hay que asegurar siempre el bienestar del animal, ya que están sometidos a mucha presión con este tipo de trabajo, por lo que se le debe de proporcionar un ambiente saludable fuera de su ámbito laboral.
Si estáis interesados en contactar con centros o asociaciones que trabajen con TAA (Terapia asistida por animales) aquí os dejo unas direcciones de interés:
Asociación de animales de servicio (Madrid).
Telf.: 981 845 785.
Correo electrónico: [email protected]
Educan (Madrid):
Telf.: 902 160 156
Terapia animal (Zaragoza).
Telf.: 649058 969
Correo electrónico: [email protected]
Montse Arias
Redacción Perros.com
“Grosso modo” haré un breve viaje histórico:
El primer registro que se tuvo, data del año 1792, en un asilo de York (Reino Unido). Utilizaron perros como modificadores positivos de conducta.
1867, en Bethel (Alemania) los utilizó para sobrellevar la epilepsia de algunos enfermos, con resultados muy positivos.
1940, el Centro Pawling de Convalecencia de las Fuerzas Aéreas norteamericanas, decidió relacionar animales de granja con veteranos convalecientes.
1962, el psiquiatra Boris Levison que siempre iba a la consulta con su perro Jingles, descubrió de manera anecdótica, como un niño que había entrado en la sala de espera de su consulta, bastante nervioso, comenzó a acariciar a su perro y logró tranquilizarse de manera sorprendente, antes de entrar en su despacho.
1970, Sam y Elizabeth Corson, en el hospital de Ohio State University, buscaron la interacción de los perros con los enfermos. Los pacientes al oír a los animales ladrar, pedían jugar con ellos, mejorando su conducta introvertida.
En España la entrada de esta terapia ha sido tardía. En 1990 la Fundación Affinity, presentó la terapia asistida por animales de compañía a la comunidad médica española. Gracias a ellos, hoy en día tenemos asociaciones que están ayudando a miles de niños y personas que tanto lo necesitan y que responde de manera muy positiva a los estímulos generados por todo tipo de animales, no sólo perros.
Entre los beneficios de estas interacciones, las cuales están ya más que contrastadas, se encuentran las siguientes:
Reduce el estrés en los enfermos de Alzheimer, ayudando a reducir los temblores que aquejan a las personas que desgraciadamente padecen esta enfermedad.
Produce un efecto relajante y sedante cuando entran en contacto con gente que tiene desequilibrios psicológicos.
En centros penitenciarios, reducen los niveles de violencia y aislamiento de los reclusos.
Hoy en día, en las grandes empresas, sólo unas pocas por desgracia, permiten la entrada de las mascotas en el trabajo, ayudando a una mejor del rendimiento, estar más relajados y hacer un ambiente laboral más distendido y familiar.
Con niños autistas, la interacción con perros, caballos, delfines ha sido casi siempre positiva.
De forma individual ayudan a:
Mejorar todos nuestros sentidos , ya que estamos pendientes de ellos, bien a través de la vista, el oído, por si nos “dice algo”, el tacto, ya que el tocar y ser tocados nos relaja, acariciarlo ayuda a bajar nuestro ritmo cardíaco y la presión arterial.
En cuanto al sistema motor, nos ayuda a hacer ejercicio, por los paseos que damos, también ayuda así a nuestro sistema cardiovascular.
En el nivel psicológico. Nos fuerza a interactuar con nuestros semejantes y hablar con personas con las que nos cruzamos y tienen otro perrito…
Mejoran nuestra autoestima, los perros no juzgan ni critican nuestra forma de ser, por muy detestable que sea
.
Mejora la toma de decisiones, ya que somos responsable de un ser vivo y tenemos que tomar las mejores decisiones para que su vida sea lo mejor posible.
Desarrollamos con ellos pensamientos positivos, ya que no nos crean pensamientos problemáticos.
Ahora bien, no debemos olvidarnos, de que son terapias complementarias. Si se está siguiendo un tratamiento médico debemos de seguir con el. También hay que recordar que no hay unas reglas fijas en la duración de estos tratamientos y que el ambiente tranquilo y la paciencia son dos factores fundamentales para lograr mejorías.
El perro, para que pueda ser “terapeuta” debe estar sano y siempre bajo la vigilancia de la persona que esta a su cargo.
Hay que asegurar siempre el bienestar del animal, ya que están sometidos a mucha presión con este tipo de trabajo, por lo que se le debe de proporcionar un ambiente saludable fuera de su ámbito laboral.
Si estáis interesados en contactar con centros o asociaciones que trabajen con TAA (Terapia asistida por animales) aquí os dejo unas direcciones de interés:
Asociación de animales de servicio (Madrid).
Telf.: 981 845 785.
Correo electrónico: [email protected]
Educan (Madrid):
Telf.: 902 160 156
Terapia animal (Zaragoza).
Telf.: 649058 969
Correo electrónico: [email protected]
Montse Arias
Redacción Perros.com
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