Historia.
Las colinas de Cheviot son las que vieron crecer a esta raza cazadora e infatigable, originaria de la frontera entre Inglaterra y Escocia, donde los utilizaron como perros de trabajo tanto por los granjeros como pastores y habitantes de la zona.
Expuestos a las duras inclemencias metereológicas, desarrollaron un pelaje duro y resistente al agua.
Por lo demás se sabe poco de esta raza en cuanto a su historia, sólo a principios del siglo XX fue reconocida por el English Kennel Club.
Características generales:
De constitución pequeña, este valiente e inagotable perrito, es muy eficaz para desalojar de su guarida al zorro u otras alimañas de características similares. Gracias a esto y a su alta resistencia para acompañar a los jinetes y sus monturas en largos recorridos, era ideal para llevarlo a la tan típica, como inglesa, caza del zorro.
Otra de sus mejores cualidades es su buen carácter y temperamento.
Cabeza
Con el cráneo ancho, hocico corto y trufa negra, por noma general.
Orejas
Pequeñas en forma de "V", de grosor mediano, caen hacia delante totalmente pegadas a las mejillas.
Cuello
Es moderadamente largo y fuerte, sin tener una robustez exagerada.
Tronco
Largo y estrecho, se debe poder medir uniendo las dos manos detrás de los hombros.
Cola
Corta pero ancha en la base, irá perdiendo grosos conforme se vaya acercando a la punta. La lleva siempre recta.
Extremidades
Anteriores: Ligeras.
Posteriores: Como buen corredor, con musculación adaptada a tales menesteres.
Pies: Redondeados y de pequeño tamaño.
Manto
Pelo: Duro y tupido exteriormente, más suave en la raíz.
Colores: Sal y pimienta, trigo, azul y fuego, rojo y gris y fuego.
Promedio de vida.
Doce años.